Publicado en "DOSSIER POLÍTICO"
Por Pedro García Palazuelos.
En tratándose de investigaciones sobre delincuencia, existe un proverbio socorridamente frecuente…“¡¡DUDA!!...y acertarás”. La delincuencia SIEMPRE opera con métodos típicos que distinguen “los quién” y “los porqués” de los delitos cometidos.
Dentro de la vorágine delictiva a la que se le ha sometida a la seguridad pública del territorio mexicano, en nombre de una “guerra” supuesta, “contra el narcotráfico”, existen abundantes conductas ATÍPICAS que NÓ concuerdan con el TÍPICO comportamiento operativo de la delincuencia NATURAL mexicana; y SÍ en cambio se asemejan en mucho a los TÍPICOS operativos encubiertos acostumbrados a ejecutar por comandos paramilitares extranjeros con comisiones encomendadas, ó, por mercenarios nacionales reclutados por extranjeros ó grupos nacionales con poder de facto.
A juicio profesional del que esto escribe, con certeza de un 98%, AHÍ se ubica la residencia donde tienen su domicilio y donde se encuentran los asesinos nó solo de los tres últimos ultimados empleados del Consulado Norteamericano, sino también la de una inmensa mayoría de los miles de ejecutados en México en los últimos 4 años de “guerra” contra “el narcotráfico”…que tampoco es tal.
Los largos decenios que profesional y cotidianamente nos han ocupado las tareas de investigaciones y procesos penales en el campo del narcotráfico nos han regalado el conocimiento claro y transparente en cuanto qué:
A).- Tanto en Estados Unidos como en México, JAMÁS, el narcotraficante, logra desarrollar sus actividades de narcotráfico a un nivel importante y cuantioso, SIN PROTECCIÓN POLÍTICA, POLICIAL Y GUBERNAMENTAL del lugar donde desenvuelve su tráfico.
B).- En México, la dificultad ó imposibilidad de integrar una clara, expedíta y contundente investigación que arroje de manera pronta el descubrimiento y detención de los VERDADEROS responsables materiales e intelectuales del crimen, SIEMPRE ES, porque los ejecutores del crimen están protegidos por POLÍTICOS, POLICÍAS, GOBERNANTES, O GRUPOS FACTICOS DE PODER POLÍTICO O ECONÓMICO, del lugar donde cometieron el crimen, ó….DE UN PAÍS EXTRANJERO que los comisionó encubiertamente, para tal “misión”.
Todos quienes con seriedad profesional imparcial conocemos las REALIDADES del narcotráfico, sabemos con meridiana claridad que las VERDADERAS razones de la actual “guerra” contra el narcotráfico que actualmente se desarrolla en el solar nacional de México, tanto por el ejecutivo federal mexicano como por el gobierno de Estados Unidos, nó son las de “erradicar el narcotráfico” ní por razón del “cuidado de la salud de los ciudadanos” para que las drogas no lleguen a nuestros niños y jóvenes…éso, con todo respeto, pero son “falsas banderas” vendidas para alimento público, y nada más.
Luego entonces, las últimas tres muertes donde las víctimas fueron 3 empleados del Consulado Norteamericano en Ciudad Juárez Chihuahua, su consumación se inscribe solo en una de las siguientes DOS hipótesis:
1.- Fueron ejecutados por un comando paramilitar de Estados Unidos a quienes se les encomendó desde aquel país tal comisión, a fin de provocar un elemento sensible detonante justificativo de alguna acción injerencista MAYOR y DEFINITIVA en México, o de imposición al otorgamiento de alguna ALTA concesión política a favor de los interéses gubernamentales norteamericanos.
2).- Fueron ejecutados por un grupo paramilitar mexicano contratado por delincuentes narcotraficantes mexicanos por alguna actividad “informativa SENSIBLE” que dichos empleados desempeñaban encubiertos en sus cargos de empleados del Consulado.
Es indudable que independientemente de quiénes hayan sido los consumadores de estos tres últimos crímenes, así como los de los otros miles cometidos con anterioridad…son todos ellos, asesinos que deben ser llevados ante la justicia. http://licpalazuelos.blogspot.com/ Lic. Pedro García Palazuelos.